Dentro de una consulta, delante de un espejo.
De frente de un espejo dividido en trozos, esto es lo que te puedes encontrar; en un trozo el tronco, en otro trozo las piernas, en el siguiente departamento los brazos, arriba del todo la cabeza. Después de ver todas las partes del cuerpo, podemos unir cada parte con su médico. Según la especialidad, concretamente; el pneumólogo, el traumatólogo, el fisioterapeuta,... el psicólogo y/o el psiquiatra. De entre todos ellos, este último, el psiquiatra, en nuestra sociedad no está del todo bien visto. Se establece mucho tabú entre los que vamos y no vamos a las consultas.
El estar pasando por momentos de debilidad parece que te transforma en persona débil a su vez, lejos de la realidad. En nuestros tiempos se pide estar fuerte y perfecto. Luego, no vemos que a veces nuestra mente precisa un médico y no porque es débil precisamente, justo lo contrario; para ser dueñ@ de tu mente y tu cuerpo, para ser un@.
Nadie dijo que la vida fuera a ser fácil y cuando hay necesidad de medicación podemos recurrir a Hipócrates, el cual nos dice:" haz de la comida tu medicación y transforma la medicación en tu comida".
De esa manera, lo que nos dirá el espejo será; que lo verdaderamente importante es unir cada parte del cuerpo con su especialidad médica, pero que debemos de tener una imagen integral de nosotros mismos, siendo y sintiéndose, una persona; física, psicológica y espiritualmente estable.
Marisol Andrade.
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