Hay días que esperas que no te pille el toro. Sobre todo en las temporadas de revisiones médicas: que si la neuróloga, el trauma, la oftalmóloga, etcétera, etcétera, etcétera.
Nosotros además tenemos una hora de viaje para ir a Donosti y otra de vuelta; supone un desbarajuste de horarios y está el añadido de saber que sabes cuando entras pero no sabes cuándo vas a salir. Por ello y por cosas como el trabajar los dos fuera de casa tuvimos que organizarnos en el tema; comidas, cenas y meriendas.
Lo que se nos ocurrió fue generar comida casera refrigerada. Hecha con mucho mimo, de diferentes sabores, es decir, combinar diferentes platos: carnes, pescados, meriendas, legumbres,etcétera. Dejándolos ya listos para descongelar y comer.
Nosotros además tenemos una hora de viaje para ir a Donosti y otra de vuelta; supone un desbarajuste de horarios y está el añadido de saber que sabes cuando entras pero no sabes cuándo vas a salir. Por ello y por cosas como el trabajar los dos fuera de casa tuvimos que organizarnos en el tema; comidas, cenas y meriendas.
Lo que se nos ocurrió fue generar comida casera refrigerada. Hecha con mucho mimo, de diferentes sabores, es decir, combinar diferentes platos: carnes, pescados, meriendas, legumbres,etcétera. Dejándolos ya listos para descongelar y comer.
La verdad es que nos supone un gran ahorro en tiempo para poder dedicárselo a otras actividades o bien para como explicado antes, no nos coja el toro, un día de médicos.
A veces incluso para nosotros y nuestras comidas también utilizamos este sistema; un día haces alubias, pues aprovechas y cocinas para un par de días más, así conseguimos un extra de tiempo para no sólo cocinar esas mañanas. Mañanas duras; cazuelas y más cazuelas.
Aunque luego aprendes a sacar tiempo para vivir un poquito y descansar.
Espero este consejo le valga a alguien que en situación de estrés le saque del apuro. ¡Hay que organizarse en las comidas!.
Marisol Andrade
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