Acabamos de sembrar el 2017, tan sólo hemos esparcido las semillas de los juguetes que arrancan o refuerzan los estereotipos de las personitas que debemos educar.
Decía Socrates: " No puedo enseñar nada a nadie. Sólo puedo hacerles pensar".
Y es que realmente eso es lo que debiera ir implícito en educar; enseñar a pensar, no a memorizar. Desde casa hasta la escuela.
Matthew Lipmam, trabaja en hacer filosofía para niñ@s, con el fin de suplir las deficencias del sistema y ofrecer alternativas viables con experiencias globalizadoras no limitadas al ámbito escolar. Teniendo en cuenta, que todo cuanto ayude a descubrir el sentido de la vida; es educación.
Con lo cual volvemos a la zona de juego, zona de educación, donde otro de los grandes decía:
"Puedes descubrir más sobre una persona en una hora de juego que en un año de conversación "
(Platón).
Si miramos los catálogos de juguetes observaremos que el camino hacia la igualdad, se quiere dar, pero nos queda mucho que eliminar.
Las pistas de coches, los Hotwheels, los nuevos drones, las estaciones interespaciales , las naves, coches, construcciones y trajes de super-héroes van unidos al niño (género masculino). Prevalecen el azul, verde y amarillo como colores.
La actividad de cuidadoras, cocinas, de servicio de maternidad, peluquería, manicuras, tattos, princesas, hadas o mariposas es claramente de las niñas ( género femenino). Prevalencen los colores rosas, dorados y pasteles claros.
Hay un espacio que no se llena, ¿donde se metamorfosea un niñ@? ¿no hay crisálida de mariposa para el género masculino? ¿ la niña no puede optar a ser el médico? , siempre le toca llevar el traje de enfermera...¿no puede ponerse su traje de montaña y ponerse a ser una Indiana Jones o Tomb raider ? La super exploradora, por no decir la superheroina de la historia.
Las costumbres, tradiciones arraigadas y poco sanas no nos ayudan a romper con los estereotipos. Cuando ya aparecen los prejuicios se remata la cosa, porque es peor que el estereotipo en sí. Educar a romper estereotipos y prejuicios hoy día es necesidad.
En nuestras manos esta el hacer; un modo constructivista para la tradición. Alejar el olor a rancio de la costumbre y darle el frescor que el niñ@ precisa. No abogar por un pensamiento racista y/o sexista. No manda el sexo, debemos ver a las personas, para formarlas en igualdad.
Real Kiddys es una plataforma que está en ello.
La solución es dar alternativas, ofrecer el abanico de posibilidades abiertamente y que elijan según sus gustos y preferencias.
Llevamos un ADN en nuestras gónadas, pero el ADN mitocondrial esta en todas las células y éste es sólo materno.
Es hora que las madres les hagamos partícipes de que se puede cambiar el papel de la mujer en la historia, pero también el del hombre; para que en ciertas situaciones no se vea como un hombre infravalorado por enseñar sus sentimientos más íntimos.
Esto ha pasado también en el rol de la mujer como ama de casa, cuidadora. De ahí que al empezar a cambiar los roles el hombre tome ese "infravalor".
Hay que enseñar a mostrar las emociones tal y como las sentimos; y que llorar no es de débiles, no se deben menospreciar esas situaciones. Tampoco que el rosa y bailar indican inframasculinidad.
Hay que apreciar esos saltos cuánticos en el tiempo; es de personas, de grandes personas que quieren un camino por la igualdad.
Veremos los resultados a lo largo de este 2017 , tras haber realizado la siembra con el: Olentzero, el Papá Noel o los Reyes.
Decía Socrates: " No puedo enseñar nada a nadie. Sólo puedo hacerles pensar".
Y es que realmente eso es lo que debiera ir implícito en educar; enseñar a pensar, no a memorizar. Desde casa hasta la escuela.
Matthew Lipmam, trabaja en hacer filosofía para niñ@s, con el fin de suplir las deficencias del sistema y ofrecer alternativas viables con experiencias globalizadoras no limitadas al ámbito escolar. Teniendo en cuenta, que todo cuanto ayude a descubrir el sentido de la vida; es educación.
Con lo cual volvemos a la zona de juego, zona de educación, donde otro de los grandes decía:
"Puedes descubrir más sobre una persona en una hora de juego que en un año de conversación "
(Platón).
Si miramos los catálogos de juguetes observaremos que el camino hacia la igualdad, se quiere dar, pero nos queda mucho que eliminar.
Las pistas de coches, los Hotwheels, los nuevos drones, las estaciones interespaciales , las naves, coches, construcciones y trajes de super-héroes van unidos al niño (género masculino). Prevalecen el azul, verde y amarillo como colores.
La actividad de cuidadoras, cocinas, de servicio de maternidad, peluquería, manicuras, tattos, princesas, hadas o mariposas es claramente de las niñas ( género femenino). Prevalencen los colores rosas, dorados y pasteles claros.
Hay un espacio que no se llena, ¿donde se metamorfosea un niñ@? ¿no hay crisálida de mariposa para el género masculino? ¿ la niña no puede optar a ser el médico? , siempre le toca llevar el traje de enfermera...¿no puede ponerse su traje de montaña y ponerse a ser una Indiana Jones o Tomb raider ? La super exploradora, por no decir la superheroina de la historia.
Las costumbres, tradiciones arraigadas y poco sanas no nos ayudan a romper con los estereotipos. Cuando ya aparecen los prejuicios se remata la cosa, porque es peor que el estereotipo en sí. Educar a romper estereotipos y prejuicios hoy día es necesidad.
En nuestras manos esta el hacer; un modo constructivista para la tradición. Alejar el olor a rancio de la costumbre y darle el frescor que el niñ@ precisa. No abogar por un pensamiento racista y/o sexista. No manda el sexo, debemos ver a las personas, para formarlas en igualdad.
Real Kiddys es una plataforma que está en ello.
La solución es dar alternativas, ofrecer el abanico de posibilidades abiertamente y que elijan según sus gustos y preferencias.
Llevamos un ADN en nuestras gónadas, pero el ADN mitocondrial esta en todas las células y éste es sólo materno.
Es hora que las madres les hagamos partícipes de que se puede cambiar el papel de la mujer en la historia, pero también el del hombre; para que en ciertas situaciones no se vea como un hombre infravalorado por enseñar sus sentimientos más íntimos.
Esto ha pasado también en el rol de la mujer como ama de casa, cuidadora. De ahí que al empezar a cambiar los roles el hombre tome ese "infravalor".
Hay que enseñar a mostrar las emociones tal y como las sentimos; y que llorar no es de débiles, no se deben menospreciar esas situaciones. Tampoco que el rosa y bailar indican inframasculinidad.
Hay que apreciar esos saltos cuánticos en el tiempo; es de personas, de grandes personas que quieren un camino por la igualdad.
Veremos los resultados a lo largo de este 2017 , tras haber realizado la siembra con el: Olentzero, el Papá Noel o los Reyes.
Marisol Andrade.
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